martes, enero 31, 2006

¡Ya somos jefes!


Cuando el 16 de septiembre del año pasado dejé a mi fiel compañera de trabajo, la cámara de televisión (aclaro para los mal pensado), ponía pausa a cinco años de trabajo poniendo la cara a las noticias económicas del Canal 13 (el más grande de Chile). Pensé en algún minuto -de delirio- que iba a ser complicado bajarme del mundo histérico y frenético de la prensa, para pasar el mundo de la pausa, la sabiduría y la reflexión de los libros. Pero la verdad no ha sido nada complicado. Si creía que mi vida iba a ser más pausada y tranquila, reconozco que me equivoqué, pero me equivoqué para mejor.

Han pasado cuatro meses y cada minuto se vive a mil por hora. La cabeza se abrió y miles son las ideas que se procesan a cada minuto. Sueños y proyectos periodísticos se construyen y se desmoronan en un abrir y cerrar de ojos, aunque estoy seguro que más de alguno resultará.

¡Vamos Juan que podemos ser los nuevos Rupert Murdoch!
Y si no se puede ninguno de esos, ya se abrió una nueva puerta. Y José Luis Orihuela nos dio el poder, cual Obi Wan Kenobi mítico personaje de la más grandiosa trilogía.

Acá no se necesita pasar el sombrero para conseguir el financiamiento para los computadores, las cámaras de tv, de fotos, las rotativas, el papel, la oficina, la publicidad, etc.

Un nuevo mundo aparecía ante nuestros incrédulos ojos. Los 20 MGEC`s (estilo restorán gringo) nos convertimos en micro empresarios de las comunicaciones, pasamos a ser dueños de nuestro medio de comunicación, el cual podríamos administrarlo, editorializarlo e incluso cerrarlo sin darle explicaciones a nadie.

Además, nos convertíamos en nuestros propios jefes y para muchos la felicidad de no tener editores, sino lean a mi cristalina amiga Lourdes.

Así dejaba atrás el salto de Chile al mundo (exagero un poco porque el Canal 13 no es tan conocido), para saltar de cualquier parte al mundo, al espacio -me corrijo- al ciberespacio. Ganamos una tremenda herramienta que nos brinda la tecnología. Ganamos un tremendo espacio para pensar, reflexionar y compartir nuestras ideas. Atrás quedaba la imagen que los blogs eran sólo diarios de vida en la web. Es un tremendo espacio de acción sobretodo a los periodistas, no se trata de monopolizarlos, pero sí es un nuevo campo que debemos explorar y sacarle el máximo de provecho.

Eso sí hay que dedicarle tiempo. Y si creía que lo iba a tener cuando estuviera acá en España, me equivoqué una vez más.