Uno de los principales conflictos del día a día del periodista es la lucha-negociación a la que se ve sometido con su editor para publicar una historia. Si a esto, le sumas que tampoco es necesario poseer grandes conocimientos sobre lenguaje de programación informático, la libertad para emitir mensajes urbi et orbe es total. La Coctelera por ejemplo, te permite de forma fácil tener tu propio weblog, como nos sucedió a los 20 alumn@s de MGEC el pasado martes 24 de enero.
La primera impresión o conocimiento superficial de las bitácoras te puede inducir a pensar que estos sitios de la web no son más que meros recopilatorios de historias más o menos anecdóticas, autobiográficas que no te aportan ningún valor informativo. Sin embargo, es grato, por un lado, descubrir que los weblogs pueden ser auténticos medios de comunicación, fuentes de noticias y opinión, pero por otro lado, el revés de esta moneda podría ser que a los periodistas les han salido auténticos competidores.
Frente a los medios convencionales que suponen estructuras sujetas a sistemas económicos y legales que las determinan y regulan, internet generaliza el acceso y permite la publicación de cualquier información.
Los medios de comunicación siempre han luchado en pro de la libertad, de la movilización social y sólo se ha conseguido la verdadera democratización de los medios no procede de las ideas sino del avance tecnológico.