Debo confesar que en ocasiones fui una de sus detractoras. Quizas por desconocimiento. Tal vez por novedad. Al punto de llegar a odiarlos

Gente que escribe sobre sus vidas poco interesantes, opiniones que poco tienen de aportación a la sociedad o que no son del interés colectivo. Asi pensaba. Pero todo cambio después de mi paso por el MGEC. Ahora ya tengo hasta mi propio blog.
Y no es que esto me vaya a convertir en una fan de los blogs ni mucho menos, pero ahora los considero un foro abierto de opinión que puede hacerte ver la vida desde otra perspectiva o simplemente son un modo de compartir tus ideas de forma libre, experiencias por el mundo, sobre los que se quedan tirados en ciudades desconocidas, quienes se camban la peluca o simplemente visiones de un mundo complejo.
Exhorto al mundo a que utilicen esta nueva forma de expresión que nos proporciona el ciberespacio.